Pueden administrarse como medida de choque hasta recibir el tratamiento específico y en las dosis que paute el veterinario
La farmacia veterinaria es una rama especializada de la farmacia tradicional que se dedica a la preparación y dispensación de medicamentos para animales. Y aunque la mayoría de los principios activos utilizados para tratar a las mascotas sean los mismos que los que se aplican en humanos, su dosificación y formulación pueden variar significativamente debido a las diferencias en el metabolismo y tamaño. Así pues, debemos seguir rigurosamente la pauta de administración especificada por el veterinario.
Al igual que en nuestro caso, los animales también sufren enfermedades y requieren tratamientos médicos específicos. Pero para cada animal deben utilizarse exclusivamente aquellos medicamentos que se hayan evaluado en dicha especie.
Efectos secundarios
Un ejemplo común es el uso de analgésicos como el paracetamol. Mientras que es seguro y efectivo para aliviar el dolor en los seres humanos, puede ser tóxico en gatos y causar daños hepáticos. Esto se debe a que los gatos carecen de una enzima necesaria para descomponer el paracetamol de manera segura.
Otro ejemplo es el ácido acetilsalicílico, la aspirina, que puede ser utilizada en perros para tratar el dolor y la inflamación. Sin embargo, la dosis debe ser cuidadosamente calculada y administrada por un veterinario, ya que una sobredosis de aspirina puede provocar daño en el estómago y los riñones.
Además, existen medicamentos veterinarios específicos que no se utilizan en seres humanos. Estos medicamentos están especialmente formulados para las necesidades de los animales y pueden incluir fármacos específicos para tratar enfermedades o condiciones comunes en veterinaria.
Cantidades recomendadas
En el ibuprofeno por ejemplo, la dosis humana recomendada para adultos es de unos 1200 mg diarios, es decir, 400 a 600 mg cada 4 a 6 horas. En perros la dosis recomendada es de 5 mg por kilo pero se ha visto que el uso prolongado puede provocarle efectos secundarios. En gatos la dosis terapéutica no se ha establecido pero se sabe que a partir de 100 mg por gato aparecen úlceras gástricas. El margen terapéutico para los humanos, es decir la seguridad del producto, es parecido a la aspirina y no suele dar problemas. En perros, el margen es mucho más estrecho, a partir de 8 mg empieza a haber problemas y los gatos son doblemente sensibles.
En resumen, aunque existen similitudes entre los medicamentos humanos y las medicinas animales, es importante tener en cuenta que cada especie animal tiene sus propias necesidades y particularidades. Por ello, es fundamental contar con la supervisión de un veterinario para proporcionar un tratamiento seguro y efectivo a nuestros animales de compañía.
En España, la venta de productos veterinarios en las farmacias españolas son significativas y abarcan una amplia variedad de productos médicos, de alimentación y para el cuidado de las mascotas. Las ventas de estos productos veterinarios en las farmacias españolas, han incrementado sus ventas desde 2019, ya que como se indica en un informe del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España, sólo es posible la adquisición de dichos productos, en farmacias convencionales.
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