Se iguala su regulación a la del cigarrillo convencional, por lo que también deberán incluir imágenes y mensajes advirtiendo del riesgo para la salud
El tabaco calentado, una forma de fumar poco extendida en España que gozaba de una normativa más relajada, se regirá, a partir de ahora, con la misma regulación que el convencional. El Consejo de Ministros ha llegado a un acuerdo para ampliar la prohibición de comercializar productos del tabaco con aroma característico o que contengan aromatizantes en sus componentes. No obstante, la normativa afecta solo al tabaco calentado y no a todos los dispositivos de vapeo.
Con esta reforma se amplia el veto a la comercialización de productos con aroma característico o que contengan aromatizantes en sus componentes.
Nuevas obligaciones
El consejo de ministros acordó el pasado martes equiparar en España la regulación de los cigarrillos electrónicos con la que rige a los productos del tabaco tradicional y, por tanto, le impone al tabaco calentado las mismas restricciones y obligaciones que ya cumplen desde hace años las cajetillas y los envases de picadura para liar.
La nueva regulación explica que tanto las unidades de envasado del tabaco calentado como su embalaje exterior deberán incluir las fotografías a color mostrando entre otras las lesiones causadas por este hábito; pulmones necrosados por el humo y la nicotina, bocas desdentadas o pacientes con insuficiencia respiratoria conectados a mascarillas o traqueotomías.
¿Vapers para dejar de fumar?
Los vapeadores se quedan fuera de esta nueva regulación ya que no contienen tabaco, aunque pueden llevar nicotina, aunque sanidad está trabajando también para regularlos. Aun así, cada vez son más los fumadores que empiezan a vapear para dejar de fumar. Y es que estos cigarrillos electrónicos generan la falsa expectativa de que son más sanos que el tabaco e incluso se ve como un paso previo para la adicción a la nicotina.
Mientras que algunos especialistas sostienen que sí se puede vapear para dejar de fumar, otros opinan lo contrario. Estos últimos afirman que cifras elevadas de fumadores que han intentado dejar de fumar con este método, terminan volviendo a su viejo hábito. Normalmente eso suele pasar cuando no han sido bien asesorados o no han tenido la necesaria fuerza de voluntad para realmente dejar el hábito.
Consejos para dejar de fumar
Antes de nada, debes saber que dejar de fumar, ya sea con tratamiento o sin él, puede llevarte a sufrir cambios de humor (sensación de depresión, irritabilidad, ansiedad…), insomnio y dificultad para concentrarse, además de la disminución de ritmo cardíaco o el aumento de apetito y como consecuencia de peso. Pero todos estos síntomas son temporales y si finalmente dejas de lado el tabaco, habrás conseguido un logro personal que tu salud agradecerá siempre.
Algunos de los consejos para dejar de fumar son los siguientes:
- Retirar todo lo que te recuerde a fumar ya sean ceniceros, mecheros, paquetes de tabaco…
- Ten siempre a mano caramelos o chicles. Evita el alcohol y las comidas abundantes. Ingiere mucho líquido, especialmente agua o infusiones y zumos naturales.
- Calcular todo el dinero que se gasta en fumar y planear usarlo en algo que te apetezca hacer desde hace tiempo.
- Realiza ejercicio físico.
- Mantén tú tiempo ocupado con esas tareas que nunca se hacen por falta de tiempo.
- Ten las manos ocupadas con un bolígrafo mientras realizas tareas estáticas como por ejemplo, hablar por teléfono.
- Trata de evitar las reuniones con amigos que fuman y las sobremesas prolongadas o los descansos largos tras las comidas.
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